El dólar cerró la semana en calma. ¿Hace cuánto que no leías esto? Parece ficción, pero es una historia real. Frotate los ojos. Los tipos de cambio paralelos cerraron el viernes más abajo que antes de la primera vuelta. El dólar blue cayó de $ 1200 a $ 990. Por su parte, el MEP bajó 8,8% y el Contado con Liquidación retrocedió 23%.
La paz cambiaria llegó de la mano de los resultados electorales, que, si bien no definieron la contienda, desinflaron el ímpetu dolarizador que había dominado la campaña tras las PASO.
“Alejándose la opción extrema de una dolarización, la demanda de cobertura cedió”, consignó LCG. Pero ese no fue el único factor. El nuevo dólar exportador también apaciguó las aguas.
El dólar futuro se reacomodó al nuevo tablero político, desplomándose los contratos de octubre y noviembre. “Los movimientos en la curva de futuros sugieren que el mercado continúa recalibrando a la baja su expectativa de una salida rápida del cepo a partir de diciembre como se creía hasta el domingo dada las chances de reelección del oficialismo”, explicó en un informe PPI.
El ritmo de intervención en los dólares financieros también disminuyó significativamente tras los comicios. El BCRA raciona las reservas, mirando tanto al 19 de noviembre como al día después de las presidenciales.
La próxima sangría de reservas se dará el martes cuando Argentina desembolse u$s 2600 millones al FMI en concepto de pagos capital y el 6 de noviembre cuando cancele casi u$s 700 millones de intereses.
¿Seguirá la calma en el mercado de cambios durante la semana que viene? Todo parece indicar que el tipo de cambio se tomó una pausa y que reanudará la tendencia previa a medida que se acerque el balotaje. Las elecciones en Argentina funcionaron hasta ahora como dos oleadas de inestabilidad que se reflejaron en sucesivas corridas. ¿Por qué habría de ser distinto ahora?
A ajustarse los cinturones, que todavía quedan tres semanas.
El Cronista