El Gobierno se agarra fuerte de un par de variables para mostrar los éxitos de su gestión económica, sin dudas uno de los frentes más complejos que le tocaba afrontar. Déficit fiscal -que pretende llevar a cero, y además uno de sus argumentos fuertes de campaña- y baja de la inflación son, sin dudas, los dos grandes caballitos de batalla con los que enfrenta cualquier situación.
Sin embargo, hay otros que no puede revertir. Varios son los ítems que entran en esta columna, pero el del nivel de consumo claramente es uno contra el que no puede, y que además termina por complicar a otros como la actividad industrial, por nombrar alguno.
El último informe del Indec muestra una foto de lo que fue el primer semestre del año y es preocupante. En los supermercados, por ejemplo, las ventas cayeron 11,6% en comparación contra el mismo período de 2023.
En los autoservicios mayoristas el movimiento fue casi calcado y se dio una caída del 12,6%, también en los primeros seis meses del año.
Y para julio las cosas no habrían variado demasiado. Si bien todavía no hay datos oficiales, los privados marcan que la pendiente del consumo habría sido al menos de un 10% en la medición interanual, un dato preocupante que sumaría el noveno mes en picada.
En agosto las cifras tampoco habrían cambiado. Al menos en el arranque del mes, algunos hablan de un retroceso de igual magnitud al de julio e incluso algunos puntos por encima.
La pregunta es por qué ocurre esto en medio de una situación inflacionaria que el Gobierno desespera por decir que está bastante controlada. Y la respuesta no tiene demasiado misterio. Por más que el Gobierno se aferre a decir que el poder adquisitivo mejoró, la realidad está mostrando que los salarios no alcanzan.
El Salario Mínimo Vital y Móvil de julio cerró con un poder de compra 31,6% por debajo del que se había dado en noviembre de 2023, según indicaron desde Centro Cifra-CTA.
Los aumentos nominales que otorgó el Gobierno (en ninguna de las tres reuniones del Consejo del Salario Mínimo hubo acuerdo) acumulan un 86% hasta el mes de octubre mientras que la inflación se estima en casi el doble (162,2% según las proyecciones del REM-BCRA), explicaron en el informe.
El Cronista