Si bien el resultado de Provincias Unidas en provincias cómo Córdoba y Santa Fe fueron un baldazo de agua fría para las expectativas de sus gobernadores, otras voces internas del espacio aseguraron a El Cronista que “no les sorprendió”.
“Siempre dijimos que la polarización se podía llevar puesto a Provincias Unidas y es lo que pasó”, afirmó una alta fuente que responde al chubutense Ignacio “Nacho” Torres, quién se quedó sin bancas.
“La única provincia que no se los llevó puestos fue Corrientes. (Martín) Llaryora que hizo una pésima elección con Schiaretti”, indicaron.
En este sentido, el error principal que marcan desde el sur argentino es la focalización en ciertos candidatos “muy malos” en provincias que no eran propias. Poner a (Florencio) Randazzo en Provincia de Buenos Aires y (Martín) Lousteau en CABA fue una mala idea.
“Nos tendríamos que haber focalizado en las seis provincias de los gobernadores, probablemente les habría ido peor a nivel nacional, pero hubieran evitado nacionalizar la campaña que los perjudicó. La nacionalización fue un gravísimo error que los llevó puestos con la polarización”, cerraron.
El Cronista
