Según algunos cálculos de raigambre internacional, la jornada laboral anual ronda las 2.400 horas en el país, lo que ubica a Argentina por encima de la mayoría de los países desarrollados y casi al tope de la región.
Uno de los lugares comunes más repetidos en algunos reductos sociales es aquel que refiere a la supuesta “vagancia” de los trabajadores argentinos, que en la misma línea de análisis haría recaer sobre ese segmento de la sociedad el desarrollo trunco de la nación.
Pero lo cierto es que en Argentina se trabajan más horas que en los países desarrollados, según informes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y de la Unión de Bancos Suizos (UBS).
Acorde los últimos datos de carácter internacional disponibles, provenientes de esas entidades (de 2016 y 2017), en la Ciudad de Buenos Aires se trabaja un promedio de 1.900 horas por año.
Esos datos ponen a los porteños por encima de la media del ránking de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), que en la comparación revela que el empleado promedio en Buenos Aires trabaja más que en París (1.482 horas anuales) o que en Madrid (1.691), pero menos que en urbes como Ciudad de México (2.224) o Santiago de Chile (1.988).
Lo cierto es que ese dato, además de la limitación geográfica (sólo abarca la capital del país), está limitado a trabajadores regristrados.
Esa cifra aumenta en forma sideral si se tiene en cuenta no sólo el mercado informal sino también la gran cantidad de proporción de trabajadores cuentapropistas o autónomos, que crecieron en forma sostenida en los últimos años, según datos oficiales del Gobierno.
Según algunos cálculos, la jornada laboral anual llegaría así a rondar las 2.400 horas en el país, aunque se trata de datos no oficiales, especialmente por la dificultad que implica medir el mercado laboral “en negro”.
Estudios llevados a cabo por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) muestran que los países de ingresos bajos y medios tienden a trabajar más horas que sus contrapartes más ricos.
Esto resulta evidente al observar, por ejemplo, la última publicación de la Ocde relativa a Perspectivas de Empleo Global. Argentina no integra ese grupo pero puede servir para comparar con algunos de los que sí figuran en esa lista.
La encabeza México, con 2.225 horas anuales, seguido de Costa Rica, con 2.012. Más atrás figura Grecia, con 2.037 horas; Chile, con 1.974 horas; Estados Unidos con 1.783 horas; Francia, con 1.483 o Alemania, con 1.371 horas.
(De Conclusión)