El jefe de gobierno y el gobernador repasaron ayer la situación sanitaria en el AMBA. La Ciudad sólo permitirá algunas pocas habilitaciones y el resto seguirá igual.
El presidente Alberto Fernández recibirá al mediodía en Olivos al comité de expertos médicos para resolver cómo sigue la cuarentena ante el récord de contagios que se repiten día a día, ayer con 7.663 nuevos casos. En la previa, como ya es habitual, se reunieron el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el gobernador bonaerense Axel Kicillof para hacer un repaso de la situación sanitaria en el AMBA, que consideraron preocupante pero más o menos estable. La coincidencia de médicos y funcionarios del área de Salud de todas las jurisdicciones es que lo más sensato sería prorrogar la cuarentena por dos semanas en las mismas condiciones que ahora. Por la situación de contagios tal vez se debiera ir hacia atrás, pero entienden que ya no hay ánimo en la sociedad para eso. Tampoco consideran lógico avanzar en el cronograma de aperturas que Rodríguez Larreta tiene en carpeta en la Ciudad, que habilitaría sólo algunas cuestiones mínimas.
El anuncio de la producción de la vacuna servirá para oxigenar un poco el clima del encuentro en Olivos. Uno de los médicos del comité, Luis Camera, admitió ayer que el número de fallecidos registrados el martes -fue de 241- se encontraba por arriba del cálculo que tenían previsto para esta altura de la pandemia, que era de alrededor de la mitad. “Estamos muy preocupados por el número de fallecidos. Abrir más las cosas no me parece nada saludable en este momento. Yo mantendría la situación con los ojos muy atentos en el número de ocupación de camas”, explicó Camera, uno de los especialistas que escuchará hoy el Presidente junto al ministro de Salud, Ginés González García, antes de tomar la decisión.
Justamente, la ocupación de camas fue uno de los ítems que se repasó en la reunión que Rodríguez Larreta y Kicillof mantuvieron en la sede del gobierno porteño, en Parque Patricios. En el AMBA ya llega al 68,4 por ciento, con una ocupación un poco superior al 70 por ciento en Ciudad y un más baja en Provincia. Es un número alto pero para ser que hasta hace unos días se pronosticaba que a esta altura estarían saturadas, el cuadro no es tan grave. “Todavía estamos con margen”, comentaban en la gobernación.
Lo que decían cerca de Kicillof es que hoy el esfuerzo está centrado en mantener el nivel de empleo en medio de la crisis sanitaria. “Tenemos a la industria trabajando al 100 por ciento y al comercio en un 90 por ciento. Lo que evaluamos es que sería un error hacer un movimiento que impacte de mala manera en esta situación y que nos obligue a volver todo para atrás, lo que produciría un daño económico mayor. Lo que vemos más lógico es seguir como hasta ahora”, comentaban, siempre con el ojo puesto en la situación del sistema sanitario. “Para nosotros es tan importante la ocupación en la Ciudad como en la Provincia porque si se satura en Capital a los pacientes los van a trasladar al Conurbano. Así que todo el tiempo miramos los dos números”, explicaban en La Plata.
En lo público, los funcionarios porteños siempre tratan de mostrarse partidarios de mayores aperturas aunque en las reuniones aceptan que la situación sanitaria está complicada, pese a que el número de contagios no crece tanto como en la Provincia. Rodríguez Larreta le llevó el lunes a Fernández el esquema de aperturas que tenía previsto, pero convinieron que no era lo mejor en este momento. Tal vez el jefe de gobierno establezca alguna flexibilización para los locales de las zonas concurridas de Once, Retiro y Constitución, donde los comerciantes desde hace unos días están en rebelión exigiendo que se les permita trabajar. En cambio, los deportes individuales como tenis, golf y paddle deberían seguir esperando, según se comentaba. Lo mismo que la posibilidad de que restaurantes y bares funcionen con mesas en las veredas, como existe en Europa. La aglomeración que se produjo días atrás en una cervecería de Recoleta hizo ver que las condiciones no estaban dadas.
Se filtró una versión que aseguraba que alumnos que habían tenido dificultades en el proceso de educación a distancia en la Ciudad volverían a las clases presenciales en la primera semana de septiembre. En el Gobierno nacional lo descartaban terminantemente. Fue otra de las alternativas que Rodríguez Larreta conversó días atrás con el Presidente y también consensuaron dejarla de lado. Por alguna razón que nadie se podía justificar, salió como si fuera un hecho. “Acabamos de abrir en San Juan que es una provincia que tuvo 23 casos en cinco meses. Es fácil deducir qué tan cerca estamos de abrir en la Capital, que tiene más de mil casos diarios”, explicaban en el Ministerio de Educación que encabeza Nicolás Trotta.
Como también hace en la previa de cada anuncio, Kicillof realizará hoy su propia videoconferencia con su equipo de sanitaristas y con intendentes para hacer un análisis de la situación de la Provincia. Por la tarde, el Presidente, el gobernador y el jefe de gobierno se reunirán en el habitual cónclave en la residencia presidencial. El anuncio, como ya es tradición, será el viernes. Queda por resolver si participarán gobernadores de manera virtual, porque parte de la preocupación se trasladó a algunas provincias con una curva ascendente de casos: Jujuy, Río Negro, Neuquén, Mendoza, Córdoba y Santa Fe registraron ayer más de 100 contagios. De todas ellas, la más complicada es Jujuy por la escasa infraestructura sanitaria.
Página/12