Bruselas logró desbloquear el presupuesto comunitario y el urgente paquete de recuperación que fue vetado por Hungría y Polonia a principios de esta semana por la cláusula que vincula la recepción de dineros al respeto del Estado de Derecho. Con una aplicación diferente de la norma, ambos países dieron vía libre al acuerdo que dará fondos al bloque hasta 2027.
Los líderes de la Unión Europea consiguieron sortear la crisis política desatada el lunes 7 de diciembre, cuando Hungría y Polonia se resistieron a aprobar el presupuesto 2021-2027 que contiene, entre otras cosas, el anhelado paquete financiero de 750.000 millones de euros en fondos para ayudar a los socios más golpeados en sus economías por la pandemia de Covid-19.
El documento de presupuesto, que requería la unanimidad del bloque, fue inicialmente vetado por las dos naciones que se sintieron blanco de una cláusula de respeto al Estado de Derecho, un aparte que, por primera vez, permitirá congelar las ayudas a un país miembro si se determina que hay violaciones a la independencia judicial, a la libertad de prensa y al respeto de las minorías.
El Consejo Europeo rechazó retirar la cláusula, pero en vista de la necesidad de liberar los fondos de auxilio, Alemania, que ostenta la presidencia rotatoria del bloque hasta fin de año, llegó a un acuerdo que la contraparte reconoció como “objetivo, justo e imparcial” y que permitió levantar el veto.
“Alemania ha trabajado duro para encontrar soluciones a las preocupaciones de Polonia y Hungría y al mismo tiempo mantener el mecanismo del Estado de Derecho acordado con el Parlamento Europeo”, dijo la canciller Angela Merkel.
“Reconstruir nuestras economías”
Superadas las dificultades, se espera que el plan de presupuesto y ayudas sea aprobado este 11 de diciembre, aunque la firma se considera una mera formalidad, dado el beneplácito unánime que quedó sellado en las últimas horas.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, celebró en Twitter: “Ahora podemos empezar con la implementación y reconstruir nuestras economías”, publicó.
Michel agregó que el histórico paquete “impulsará transiciones verdes y digitales”, dado que el acuerdo sobre el Marco Financiero Plurianual (MFP) de 1,1 billones de euros y el fondo de recuperación de 750.000 millones de euros son un paso importante para los 27, que deben acordar reducciones más ambiciosas de las emisiones de gases de efecto invernadero, con el objetivo de llevarlas a un 55% menos para 2030.
Dados los antecedentes, los líderes de la UE emitirán una declaración para aclarar que el vínculo del Estado de Derecho con los fondos se aplicará solo para salvaguardar el uso adecuado del dinero y no para castigar a los países bajo el Estado de Derecho separado de la UE.
Además, en la práctica, Polonia y Hungría podrían solicitarle al Tribunal Superior de la UE que verifique si la cláusula en discordia se ajusta a los tratados del grupo, lo que podría llevar hasta dos años, e implicaría un retraso en la utilización del texto.
France 24, con Reuters y AFP