Esta semana se reincorporaron a la agencia estatal de noticias Télam los últimos despedidos por la gestión de Hernán Lombardi, que en junio de 2018 desvinculó ilegalmente a 357 trabajadores y trabajadoras. La nueva gestión también dio cuenta del estado de abandono en que se encontraban las sedes históricas de la agencia luego del cancelado experimento de trasladar la redacción principal a Tecnópolis.

La nueva titular de Télam, Bernarda Llorente, visitó la sede de Avenida Belgrano hace algunas semanas, y se encontró con un panorama desolador, con el segundo piso del edificio completamente vaciado, sin escritorios ni computadoras para el área audiovisual. La nueva gestión también decidió cancelar inmediatamente el intento de montar una redacción paralela en Tecnópolis, bajo la conducción de Rodolfo Pousá y Ricardo Carpena, que así intentaron aislarse de la lucha por la reincorporación que sostuvieron durante largos meses los despedidos, sosteniendo incluso una larga ocupación pacífica del edificio de Av. Belgrano.

En el año y medio transcurrido desde los despidos, la Justicia falló a favor de los trabajadores, considerando que el recorte del 40% del personal de la agencia que intentó Lombardi había sido ilegal, por no haber implementado previamente el obligatorio Procedimiento Preventivo de Crisis. Así, durante el año pasado fueron reincorporándose todos los despedidos por tandas, aunque sin tareas claras ya que la gestión previa prefería mantenerlos aislados.

La nueva Télam vuelve a recuperar su funcionamiento como redacción, con sus distintas áreas y los trabajadores festejan hechos tan elementales para una agencia de noticias como el de recibir cotidianamente todos los diarios en papel, uno de los tantos recortes que había implementado el macrismo en Télam, mientras avalaba aumentos desproporcionados de sueldo para el personal jerárquico.

(de Informe Político)