EL MERCADO VE QUE LA INFLACIÓN SE DESACELERA, PERO NO CREE EN LA ESTIMACIÓN OFICIAL DEL 1% PARA LOS PRÓXIMOS MESES

El REM prevé que el IPC se ubique cercano al 3,7% en septiembre, mientras la pauta interanual se ubicó en 127,4%. ¿Hay posibilidad de que la variación llegue al 1% en el noveno mes del año como dijo Luis Caputo?

El ministro de Economía, Luis Caputo, en una reunión con Alycs realizada la semana pasado prometió que la inflación llegaría al 1% en septiembre. Sin embargo, el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), que publica mensualmente el Banco Central (BCRA), no observa que para el noveno mes del año pueda llegarse a esa meta. Y las principales consultoras, por su parte, tildan de “ambiciosa” a la pauta pronosticada por el funcionario.

El REM prevé que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubique cercano al 3,7% en septiembre, mientras que los que mejor pronosticaron esa variable en el pasado lo proyectan cerca del 3,3%. En ambas ocasiones, la cifra queda muy lejos de la pauta prometida por Luis Caputo. En tanto, la pauta interanual se ubicó en 127,4%.

Las principales consultoras dudan de una inflación del 1% para septiembre y la mayoría coincide que para el noveno mes del año el IPC se ubicaría cercano o por encima del 3%. En ese sentido, el economista de C&T Asociados, Camilo Tiscornia, catalogó de “ambiciosa” a la pauta inflacionaria oficial. Sin ir más lejos, la consultora que maneja junto a María Castiglioni proyectó una variación de 4,4% para julio, lo cual haría muy complejo que la desaceleración llegue al 1%. Sin embargo, el especialista reconoció que el Gobierno “insiste” en que el dato del séptimo mes del año estaría por debajo del 4%.

Desde Analytica, Claudio Caprarulo coincidió con que es una meta ambiciosa, ya que desde la consultora prevén al IPC “levemente superior al 3% mensual” para el noveno mes del año. “En el corto plazo, no vemos posible una tasa de ese guarismo de forma sostenida. Será el resultado de resolver desequilibrios macroeconómicos que aun, como era esperable, están presentes en nuestra economía”, precisó.

Entre las principales variables a resolver por el Gobierno, Caprarulo destacó:

  1. Tipo de cambio muy apreciado;
  2.  Reservas netas negativas;
  3.  Salarios son muy bajos;
  4.  Tarifas de algunos servicios públicos que aún se prevé que aumenten, si se busca reducir subsidios.

¿Sólo la inflación núcleo?

En la interpretación del economista de la Fundación Libertad y ProgresoAldo Abram, el ministro de Economía podría haber hablado de la inflación núcleo. “En septiembre se supone que va a haber una baja del impuesto PAIS y eso se espera que impacte en los precios internos a la baja, así como en los servicios. Esto va a tener un impacto en la núcleo y podría desacelerarse al 1%”, analizó el especialista. En junio la núcleo se ubicaba en 3,7% mensual.

Ahora bien, Abram coincidió con los demás especialistas en que es ambiciosa la meta de 1%.“Creo que el IPC empezaría muy probablemente con un 2“, proyectó y explicó: “Es difícil que la baja del impuesto PAIS tenga un impacto tan fuerte como para compensar lo que todavía resta de recuperación en los valores de los precios regulados y de las tarifas de servicios públicos. Por otro lado, también cabe resaltar que en mayo y junio hubo una depreciación, que tarda meses en reflejarse en el conjunto de los bienes y servicios”.

Por su parte, la economista de Eco Go Rocío Bisang, aseguró que en la consultora no observan que sea posible que el IPC llegue al 1% en septiembre. “Si bien la desaceleración de la inflación está siendo más que significativa, el arrastre de los meses previos sumado a que aún quedan aumentos pendientes en regulados (transporte, combustibles, etc.) hacen que luzca poco probable”, resaltó la especialista.

Sin ir más lejos, para mediados de agosto está previsto que aumente el boleto de transportes un 37% promedio, lo cual generará un arrastre estadístico para septiembre. Asimismo, resta ver qué ocurrirá con las tarifas de servicios, que aún se encuentran atrasadas.

Ambito