La obra del viaducto del Belgrano Sur entre Sáenz y Plaza Constitución ya tiene un 30% de avance. De momento, los trabajos se concentran en los primeros tramos, entre la calle Diógenes Taborda y la Playa de Cargas Sola, con tareas de pilotaje, columnas y dinteles. El proyecto, de 115 millones de dólares, se combina con la futura electrificación de la línea y la renovación integral de su infraestructura, recientemente anunciadas.
La obra del viaducto de la línea Belgrano Sur entre Sáenz y Plaza Constitución avanza a muy buen ritmo y ya tiene un 30% de avance.
Los trabajos comenzaron a ejecutarse entre septiembre y octubre del año pasado, luego de varios años de demoras. El proyecto había sido originalmente licitado en 2017, pero fue suspendido en 2018 por cambios en los pliegos. En 2019 fue relicitado, pero la adjudicación se demoró hasta marzo de 2021, firmándose el contrato en abril de ese mismo año con la constructora Dycasa.
De acuerdo con el Ministerio de Transporte, ya se han colocado 194 pilotes, columnas y dinteles en el primer tramo del proyecto, entre la calle Diógenes Taborda -límite de la primera etapa del viaducto, ya inaugurada- y la Avenida Amancio Alcorta. Esto ha dado paso al montaje de las vigas y losas (ver fotos). A su vez, se removieron las interferencias “por medio de canalizaciones y cámaras en veredas” en los cruces de las calles Taborda, Pepirí, Atuel, Monteagudo y Amancio Alcorta.
En el segundo tramo del proyecto, entre la Av. Amancio Alcorta y la playa de la ex estación Buenos Aires ya se han ejecutado la totalidad de los pilotes y los ensayos de continuidad. A su vez, ya se han colocado dinteles de viaducto y andenes para la futura estación Buenos Aires elevada, localizada en torno a la Av. Vélez Sarsfield. La arquitectura de la estación ya se encuentra aprobada.
En el tercer tramo, que abarca el tramo de la playa ferroviaria de cargas Sola, se realizó el levante de las vías existentes -sólo en el sector afectado al proyecto del viaducto, que fue desafectado de la operación carguera el año pasado, ya que el resto continuará operativo- y se están ejecutando trabajos de pilotaje, columnas y dinteles. En paralelo, se continúa trabajando en la ingeniería específica del señalamiento y el tendido de vías.
El conjunto del proyecto contempla una inversión de 115 millones de dólares: 55 millones aportados por un crédito de la Corporación Andina de Fomento (CAF), 35 por FONPLATA y el resto con recursos del ministerio.
La ejecución del viaducto del Belgrano Sur se encuentra íntegramente a cargo del Estado Nacional, a través de la Dirección General de Programas y Proyectos Sectoriales Especiales (DGPPSE) del Ministerio de Transporte -anteriormente conocida como la Unidad Ejecutora Central (UEC)-, área del Ministerio de Transporte que se encarga de los proyectos con financiamiento externo, tales como la electrificación y modernización de las líneas Roca y San Martín, la modernización integral de la línea Mitre y la electrificación de la línea Belgrano Sur -estas últimas dos delegadas en ADIF-.
Esto marca un contraste con los viaductos de las líneas Mitre y San Martín, cuya ejecución fue delegada por la gestión anterior en el gobierno porteño, una práctica que fue objetada por informes de auditoría y que contribuyó a la parálisis en la que quedó sumida la obra del viaducto del San Martín hasta su reciente transferencia al Estado nacional.
Cómo es el proyecto
La obra comprende la continuación del viaducto actualmente existente desde su límite en la calle Diógenes Taborda hasta la estación Plaza Constitución, que será terminal compartida de las líneas Roca y Belgrano Sur, totalizando unos 4,2 km de extensión.
El proyecto también incluye la construcción de una nueva estación elevada intermedia a la altura de la Avenida Vélez Sarsfield, que sustituirá a la ex estación Buenos Aires, clausurada en 2018 para dar paso a las obras del viaducto.
El viaducto se construirá siguiendo la traza ferroviaria actualmente levantada hasta las cercanías del cruce con la calle Zavaleta, donde comenzará a describir una curva para aprovechar una franja de vías cargueras, continuando por terrenos de la Playa de Cargas Sola. Luego, comenzará a describir una amplia curva hacia el norte para ubicarse paralelo al lateral oeste de las vías del Ferrocarril Roca hacia la altura de la Av. Suárez. Allí continuará por una pequeña franja de terrenos vacantes -expropiados para la obra, hace ya varios años- hasta alcanzar la parrilla de vías de la línea Roca, culminando su recorrido en los andenes 1 y 2 de la estación Plaza Constitución.
Se prevé que la extensión de la línea a Constitución dotará al Belgrano Sur de una mayor inserción en la Ciudad y una mayor integración a la red de transporte metropolitano, alcanzando su primera conexión con el Subte –ya que el gobierno porteño nunca construyó la extensión de la línea H hasta Sáenz-. Se estima que esta vinculación redundará en un significativo aumento del caudal de pasajeros transportado por esta línea, históricamente una de las más postergadas del área metropolitana.
La obra, además, se complementará con otras inversiones que está recibiendo o recibirá el Belgrano Sur en el futuro próximo: la electrificación de la línea en sus dos ramales, que se ejecutará con financiamiento del Banco Mundial, la renovación integral de vías en ambos ramales -en algunos tramos ya en ejecución, y en otros próxima a licitar-, la modernización integral del ramal M –con financiamiento de la CAF-, además de la extensión del ramal G desde González Catán hasta Marcos Paz y Navarro.
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