En declaraciones a Página/12, definió a estas personas como “inmorales”. Puntualizó que la práctica se extirende a gerentes de Aerolíneas Argentinas, Anses, Ferrocarriles Argentinos, Pami, Aysa y otras empresas públicas.
El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, cuestionó a distintos funcionarios, -en su mayoría gerentes y directivos- de empresas públicas que ingresaron con cargos políticos al Estado durante el Gobierno del ex presidente, Mauricio Macri, y que en este nuevo período gubernamental no quieren dejar sus cargos en las diferentes dependencias estatales. Massa denunció que dichos funcionarios, en caso de irse, piden doble indemnización y los definió como “okupas”. Fuentes de distintos organismos estatales explicaron en diálogo con este diario cómo esta situación afecta a la implementación de proyectos y políticas públicas.
En declaraciones a Página/12 el Presidente de la Cámara baja aseguró que “son unos inmorales”, y que “no sólo no renuncian a los cargos a los que llegaron por una decisión política, sino que además piden la doble indemnización que ellos mismos rechazaban cuando estaban en el gobierno”. Massa se refería a ésto ya que el 20 de mayo de 2016 Macri había vetado la ley de Emergencia Ocupacional, que fue sancionada por ambas cámaras legislativas y que pretendía prohibir los despidos por 180 días e implementar la doble indemnización. Es decir, los funcionarios de Cambiemos que aún quedan en el estado, piden para irse la doble indemnización mientras que su gobierno estaba en contra de aplicar ese resarcimiento a los trabajadores despedidos.
Massa detalló que se trata de “gerentes de Aerolíneas Argentinas, Anses, Ferrocarriles Argentinos, Pami, Aysa y de otras empresas públicas, que se hacen los distraídos esperando que los echen para pedir que les liquiden la doble indemnización”. “Esta gente no llegó con los clasificados bajo el brazo sino que fue designada políticamente y ahora pide una doble indemnización que el mismo Gobierno anterior vetó cuando el Congreso aprobó la Ley”, agregó el funcionario. En tanto, manifestó que la actitud de estas personas es “antiética” y “totalmente reprochable”: “Se quedan como okupas en el Estado y ahora piden una doble indemnización que su propio Gobierno vetó”. Según informaron fuentes cercanas a Massa, en ANSES tuvieron que realizar durante estas semanas despidos con doble indemnización porque solo hubo cuatro renuncias. “Son actitudes totalmente inmorales”, afirmaron desde el entorno del presidente de la cámara baja.
Fuentes del Ministerio de Transporte aseguraron en diálogo con este diario que “este problema se repite en todas las empresas del estado porque rige la ley de contrato laboral. Los funcionarios que no quieren renunciar son mayormente puestos gerenciales o de mayor jerarquía, principalmente directores, pero hay que tener en cuenta que cada empresa estatal tiene su propia forma de organización”. Al mismo tiempo, señaló que “las nuevas administraciones de estas empresas trabajan lo más rápido posible para solucionarlo sin pagar la doble indemnización pero un problema grave es que al no dejar los cargos, estas personas entorpecen el funcionamiento de las empresas porque no firman los documentos necesarios para avanzar con los distintos proyectos y políticas, hay casos en los que ni siquiera asisten a trabajar y, además, no permiten nuevos nombramientos”.
Consultados por Página/12 fuentes del PAMI presisaron que en el caso de esa empresa, “tenemos unos 60 casos que luego de 30 dias de gestion, siendo plantas politicas, no dan un paso al costado”.
El presidente de la Cámara de Diputados aseguró que hay que terminar en el país con “la idea de que las empresas del Estado se pueden manejar a gusto para hacer negocios”, y aseveró que “hay cuestiones que hay que cambiar definitivamente”. En ese sentido, el dirigente anunció que el gobierno que encabeza Alberto Fernández tomó la decisión de que “los que llegan con nosotros se van con nosotros”.
En cuanto a la resolución Nº 001/20 que firmó la semana pasada Massa junto a la presidenta del senado de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y que tiene como objetivo terminar con las “capas geológicas” en el Congreso de la Nación poniéndole límites a la contratación de personal, el presidente de Diputados indicó que dicha medida busca “terminar con la idea de que las plantas temporarias se transforman en permanentes”, además, aseguró que dicha norma le pondrá “un límite al gasto político”.
Según especifica la resolución “las designaciones del personal de gabinete no gozarán de estabilidad y concluirán con la finalización del mandato de la autoridad que lo nombró”. La norma estipula que “el personal que actualmente se encuentre contratado como planta temporaria con funciones que no sean las establecidas en el marco del art. 49 de la Ley 24.600 será asignado a la planta personal de gabinete o a la planta temporaria del artículo antes citado conforme disponga la secretaria administrativa, en función de las necesidades de cada una de las áreas”.
“Los cambios que pretendemos en el reglamento del Congreso buscan que se termine con la especulaciones de que entre ‘gallos y medianoches’ se decide el futuro de millones de argentinos y argentinas”, subrayó Massa. Luego agregó que “tenemos la responsabilidad de poner lo mejor de nosotros para que a Alberto Fernández le vaya bien. Entre todos tenemos que revertir el desastre que dejó el anterior Gobierno”.
Informe: Melisa Molina/Página/12.