Junto a San Juan, Salta posicionó a la Argentina en el primer lugar de Latinoamérica para invertir en minería. La evaluación anual es el resultado de una encuesta que realiza el Instituto Fraser de Canadá a cientos de empresarios del rubro. Esta edición abarcó 84 jurisdicciones.
El informe de la Encuesta Anual de Empresas Mineras 2021 publicado por el Instituto Fraser, consigna a la Provincia de Salta en primer lugar por su política de gestión minera en Latinoamérica, y a nivel nacional ocupa el segundo puesto después de San Juan, entre las más atractivas para inversiones mineras.
El documento detalla la valoración otorgada a las políticas del Gobierno que fomentan o disuaden la exploración y la inversión. En el caso de Salta, el Índice de Percepción de Políticas (PPI) otorga a la Provincia un puntaje de 81.13. Si bien las evaluaciones geológicas y económicas son requisitos fundamentales para la exploración, en la economía global competitiva actual, donde las compañías mineras analizan inversiones en regiones ubicadas en los diferentes continentes, las políticas públicas de una jurisdicción hacen la diferencia para atraer y ganar inversiones.
“Esta evaluación integral del atractivo de la política minera de nuestra Provincia, ratifica la excelente gestión minera que lleva adelante el Gobierno de Gustavo Saénz, fomentando la actividad bajo un marco jurídico y de previsibilidad”, manifestó el ministro de Producción y Desarrollo Sustentable Martín de los Ríos.
Salta, al igual que en 2020, continúa siendo la mejor clasificada en materia de política pública (PPI) ocupando el puesto 20 en el mundo. En lo que respecta a atractivo inversor es tercera en América Latina y 27º a nivel mundial.
En el ranking de Argentina, San Juan ocupa el primer lugar en el Índice de Atractivo de Inversión con una puntuación de 77.30, seguido por Salta con 67.19. Bajo un enfoque más amplio, ambas provincias, por su gestión posicionaron al país como la quinta región más atractiva del mundo para la inversión, con un puntaje promedio de 58,99.
Fuente: Editorial RN/El Inversor Energético