- El bloque de la Unión Cívica Radical en la Cámara baja y el partido de Margarita Stolbizer se opusieron al candidato de Javier Milei, vinculado al kirchnerismo.
- También formalizó su presentación el Centro de Estudios Legales y Sociales.
- La recta final para las presentaciones.
En la recta final para presentar adhesiones e impugnaciones para los candidatos a integrar la Corte Suprema de Justicia que propuso Javier Milei, parte del bloque de diputados de la Unión Cívica Radical, el partido GEN de la legisladora Margarita Stolbizer y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) formalizaron este miércoles su posición en contra de la selección del polémico juez federal Ariel Lijo.
Las presentaciones -que se realizan ante el Ministerio de Justicia que depende de Mariano Cúneo Libarona- se reciben hasta este jueves 9 de mayo, pero ante el paro nacional convocado para esa fecha, los interesados se apuran a formalizar el trámite este miércoles. Luego de ello, el Gobierno evaluará, clasificará lo recibido y enviará los pliegos de Lijo y del académico Manuel García-Mansilla para ser tratados en el Senado –o podrá desistir de las candidaturas-.
La presentación de la UCR fue de cuatro diputados: Fernando Carbajal (Formosa), Pedro Galimberti (Entre Ríos), Manuel Aguirre (Corrientes) y Marcela Coli (La Pampa). Los radicales observaron ante la cartera de Cúneo Libarona el pliego de Lijo ya que “ha cometido severas irregularidades en el ejercicio de su cargo como magistrado federal, algunas de las cuales podrían incluso configurar delitos penales”.
Además, el texto de la impugnación radical remarca que “su posible nombramiento genera resistencia y falta de confianza en parte de la sociedad, por comportamientos mantenidos en su función de magistrado”, en referencia al juez federal Lijo.
Según un comunicado emitido este miércoles por la UCR, una de las irregularidades que justificarían la impugnación de la candidatura de Lijo es la denuncia que hizo Elisa Carrió en 2018, en la que se acusaba al juez de integrar “una asociación ilícita con el kirchnerismo“. También le reprochan la falta de avances en el expediente de la estatización YPF en el que se debía investigar el vaciamiento de la empresa. Y en la causa de coimas conocida como Siemens. Ambas, como se dice en la jerga, cajoneadas por Lijo.
En este sentido, los diputados de la UCR plantearon que “el juez Lijo ha “demorado intencionalmente la tramitación de causas en las que se investigaban hechos de corrupción con la finalidad de garantizarles impunidad a los funcionarios públicos investigados”.
Le cuestionan, además, una supuesta vinculación con Ricardo Lorenzetti, juez de la Corte Suprema – y su rol en la recomendación de Lijo para el máximo tribunal que explicitó el propio Javier Milei. “Esto rompe con el principio republicano de división de poderes ya que es el Presidente de la República quien debe enviar un pliego al Senado sin intervención previa de la Corte Suprema”, advirtieron los radicales.
Galimberti, Carbajal, Aguirre y Coli suman otras objeciones: la denuncia del Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires contra Lijo por mal desempeño y la actuación del polémico magistrado en una denuncia que radicó la Tabacalera Sarandí.
Esta sumatoria de causas “revisten de pruebas de un mal juez federal,lo que consiste en un pésimo candidato y no puede ser considerado apto para cubrir una vacante en la Corte Suprema”, dicen desde la UCR.
“Un juez federal que reuniera los antecedentes del Dr. Ariel Lijo sería un candidato universalmente rechazado en cualquier república que funcione normalmente, por la sencilla razón de que generará desprestigio a la Corte Suprema como institución, socavaría la confianza tanto en el Presidente de la República que lo propuso, como en el Senado que le dio el acuerdo y, en definitiva, generaría una sensación de desprotección en toda la población en el ámbito judicial ante todo hecho de corrupción”, cierra el comunicado emitido este miércoles.
Las impugnaciones de Stolbizer y el CELS contra Lijo y García-Mansilla
Por otro lado, tanto la diputada Stolbizer (de Hacemos Coalición Federal) y su partido GEN, impugnaron ambas postulaciones. Lo mismo había adelantado el CELS, con posturas críticas a Lijo y a García-Mansilla.
La impugnación de GEN, por su parte, cuestiona “la falta de representación de género, o mirada femenina en una Corte integrada exclusivamente por hombres”, haciendo referencia además a la impronta que dejaron en la Corte las juezas Elena Highton y Carmen Argibay.
En su escrito, el GEN plantea además que “las postulaciones deben recaer sobre personas que resulten intachables, incuestionables para la consideración general del a población y del mundo académico judicial”, cualidades que, aducen, ambos postulantes no reúnen.
“¿A título de qué objetivo, bajo qué razones o con qué finalidad se formula una propuesta conjunta de dos personas que no cuentan en lo individual con la capacidad de construir consenso amplios sobre si mismas?”, se preguntan en el escrito presentado, y más abajo se responden: “Ambos postulantes, Dres. Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, han sido tachados severamente por diversas organizaciones de actuación reconocida, por la falta de antecedentes académicos o por pesar sobre alguno de ellos sospechas respecto de sus vínculos y actividades o por no brindar garantías suficientes de un compromiso inclaudicable con los derechos humanos”.
El Centro de Estudios Legales y Sociales, en tanto, informó mediante un comunicado que también presentó una impugnación a ambas candidaturas. “Entendemos que sus perfiles son incompatibles con los estándares requeridos para integrar el máximo tribunal”, dijeron.
Además de plantear que “nominar a dos candidatos varones para integrar la Corte exclusivamente con hombres es contrario a la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujeres”, el CELS cuestionó a Lijo por “las graves denuncias en el Consejo de la Magistratura, vinculadas a la falta de investigación de causas de corrupción, la demora excesiva en el tratamiento de distintos casos y el enriquecimiento ilícito”. Además, recordó que “el candidato tuvo una denuncia penal por asociación ilícita, lavado de dinero y cohecho.
En cuanto a García Mansilla, cuestionaron sus “posiciones muy regresivas sobre los derechos de las mujeres y la interrupción legal del embarazo”.
A estas impugnaciones se suman, además, las que hicieron la organización Será Justicia, que alegó la falta de formación técnica del candidato para asumir el cargo y sostuvo que Lijo “no reúne las condiciones indispensables para realizar “un aporte efectivo para el mejoramiento del servicio de justicia y al incremento de la calidad institucional”, la de La Asociación de Mujeres Jueces de Argentina, que cuestionó tanto a Lijo como a García-Mansilla, acusando una “discriminación estructural” y reclamando que el puesto le sea otorgado a una mujer y la del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales, que el jueves pasado hizo su propio descargo respecto de Lijo, marcando que “si su único mérito para integrar la Corte es su trayectoria judicial, su candidatura es inaceptable, ya que es estadísticamente el juez más ineficaz de todo Comodoro Py”.
DS/Clarín