En horas de la mañana del miércoles, distintos manifestantes decidieron tomar el Ministerio de Salud de Misiones luego de varios días de reclamos paritarios y negociaciones infructuosas. Es el corolario de protestas que incluyeron el corte en las calles Junín y Tucumán de Posadas y un acampe en esa intersección, que es donde se encuentra el edificio ministerial, además de otras acciones similares en hospitales y centros de atención de Eldorado, la tercera localidad más poblada de la provincia.
Al igual que docentes y policías, el personal de salud misionero también exige un 100 por ciento de recomposición salarial. El gobierno había ofrecido este martes un aumento del 28 por ciento que fue aceptado por los gremios UPCN y distintas de seccionales de ATE, entre ellas la más importante, que es la de Posadas.
Sin embargo, otros empleados de la salud pública misionera rechazaron esa oferta que apenas cubre un cuarto de sus expectativas. Además, distintas fuentes aseguran que uno de los delegados sindicales disidentes fue impedido de acceder a la reunión salarial que el martes protagonizaron el ministro de Salud Pública, Héctor González; el de Hacienda, Adolfo Safrán (cuestionado en todas las marchas y protestas); la ministra de Trabajo y Empleo, Silvana Giménez; el director de Liquidaciones, Miguel Dos Santos y Miriam López, secretaria general de ATE Misiones.
Esa prohibición contribuyó a caldear los ánimos y todo desembocó en la toma del edificio de Junín y Tucumán, ubicado a apenas seis cuadras del epicentro de protesta compartido por policías y docentes en la zona del Comando Radioeléctrico de Posadas, lugar en el que además otros trabajadores de salud se sumaron con su propio corte sobre la calle Trinchera de San José, sumando así un tercer protagonista en pie de lucha.
A la espera de una mejora en la propuesta salarial, los manifestantes aseguraron que continuarán con el acampe frente al Ministerio de Salud de Misiones al menos hasta el viernes.
Página/12