Esta mañana el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, se refirió al aumento de casos de coronavirus que se registra en el país y defendió su gestión y la del Gobierno al afirmar que hicieron la cantidad de tests que debían hacer y en el momento en que tenían que hacerlo, ante las reiteradas críticas de su antecesor, Adolfo Rubinstein, al respecto.

En una entrevista con radio Mitre , consultado sobre si la razón del crecimiento en la curva de contagios pese a la cuarentena, que va 96 días, se debía a la falta de pruebas masivas en la población, García aseguró que no es así y se mostró molesto por los exfuncionarios del gobierno anterior que hablan con los medios de comunicación sobre este tema.

“Hicimos siempre los testeos que había que hacer. El incremento lo hicimos cuando vimos la circulación comunitaria. Tenemos casi 300 mil PCR, no hay problemas de stock. Ya que no fueron buenos ministros, deberían ser mejores exministros”, aseguró el funcionario e insistió en el trabajo de la administración del presidente Alberto Fernández para hacer frente a la pandemia.

Desde las primeras semanas del brote en la Argentina y hasta la actualidad, el exsecretario de Salud, Adolfo Rubinstein, cuestiona la estrategia nacional, al considerar que deberían realizarse más testeos.

“Hay cien laboratorios públicos habilitados para las pruebas, antes era solo el Malbrán. Dicen que el testeo es fundamental, ¿pero qué pasó en Chile, que hicieron muchos tests? ¿Y en los Estados Unidos”, agregó García. “Hicimos una expansión a la chino, tenemos un 35 por ciento de camas más y equipos, respiradores, personal médico, fue un aporte notable”.

Asimismo, el ministro volvió a hablar sobre la posibilidad de volver a la fase 1 del aislamiento obligatorio, más estricta, dijo: “Creo que hicimos un gran esfuerzo y hay que volver a ese compromiso y hacer un esfuerzo más. Tenemos que hacer un stop ahora, frenar, podría ser muy útil parar un poquito, porque hay mucha circulación”.

“El virus está circulando mucho, hay un incremento notable del número de casos. Es una megalópolis, una concentración demográfica ante la cal hay que tomar medidas. Nunca dijimos que íbamos a eliminar la pandemia. Es un virus desconocido, difícil de manejar y de una capacidad de difusión extraordinaria. Por eso no tenemos ningún otro recurso que no sea lo que estamos usando”, añadió García, que destacó que al momento los aprendizajes son más por los errores que se conocen que por los aciertos.

Terapia intensiva

Por último, el ministro de Salud se refirió a la situación del sistema médico en el país y aseguró que son 11.000 las camas de unidades intensivas disponibles, de las cuales a nivel nacional están ocupadas al 50 por ciento y en la región metropolitana, al 65 por ciento.

“El ritmo evolutivo podría hacer que en un tiempo no demasiado largo se convierta en un problema. Puede ser que tengamos un problema dentro de unas semanas. Hoy hay 393 camas ocupadas en terapia intensiva pero podemos estar complicadísimos si el avance adquiere un ritmo exponencial. En las últimas semanas el incremento fue tan brutal que nos hizo asustar”, indicó y tras ellos confirmó: “Creo que tenemos que restringir la circulación, eso seguro. Y tenemos que salir más intensamente a buscar a los enfermos o portadores que trasmiten”.

La Nación