La organización mendocina del polémico Abel Albino no cuenta con la estructura suficiente para repartir la leche en polvo que está a punto de vencer.
Una vez más quedó en evidencia la falta de capacidad de gestión del Ministerio de Capital Humano, al frente de Sandra Pettovello. Tras quedar envuelto en un escándalo por la retención de 5 mil toneladas de comida, la funcionaria fue obligada por la Justicia a implementar un plan de entrega urgente: eligió a la polémica fundación Conin –cuyo máximo representante niega el preservativo-, que no tiene estructura suficiente y que acabó por articular la entrega con las demonizadas organizaciones sociales y políticas que tienen comedores y merenderos en distintos puntos del país. “La sensación es que el Gobierno nacional y el Ministerio, se sacaron el problema de encima”, sostuvo ante El Destape el referente nacional del MTE-UTEP, Nicolás Caropresi.
“La ministra Pettovello quiso hacer alianza con Conin para poder canalizar esta leche y a nosotros, desde aquí, nos parece que el motor más importante que junta a la gente, que sale a discutir los temas de los derechos, quienes sostienen las ollas populares, bibliotecas, están codo a codo pateando el barrio, son ustedes y quiénes más conocen a nuestra gente son ustedes”, dijo el cura Miguel “Pancho” Velo, de opción por los pobres del barrio Petracchi, de Merlo, ante de entregar parte de los casi 500 mil kilos de leche en polvo que recibió en su capilla, que vencen el próximo 7 de julio.
“Queremos que estas organizaciones que comparten también la militancia en Merlo sean los vehículos que lleven la leche, la poca leche y casi vencida leche, pero leche al fin, para que llegue verdaderamente a quienes más lo necesitan”, cerró su discurso Velo.
Según explicó Caropesi ante este medio, ese fue sólo uno de los puntos en los que se ejecutó esa articulación. Es que Conin –dirigida por Abel Albino- tiene sólo cien centros, está en 17 provincias y su epicentro se encuentra en Mendoza. En tanto, muchos de los lugares que figuran como comedores de esa organización, son iglesias o capillas que ahora se convirtieron en el punto de contacto con las organizaciones sociales luego de que el Ejército les dejara las cajas para repartir. “A algunos los fuimos a buscar nosotros, pero en otros fueron ellos los que nos buscaron. Hay una necesidad de articular con organizaciones, intendencias o escuelas porque el stock es muy grande para ellos”, apuntó.
En ese sentido, El Destape supo que, en Concordia, Entre Ríos esperan que las cajas sean entregadas a la municipalidad; en Junin, Buenos Aires, les dijeron que deberían estar registrados y en Tucumán presentaron un pedido por comedor y esperan respuesta.
Según denunció el referente social Juan Grabois en sus redes sociales el Gobierno llevó a cabo el plan que le exigió la Justicia “sin ningún plan de acción, criterio ni auditoría”. Conin, dijo, “no tiene suficientes centros y voluntarios para distribuirla, invoca a los fantasmas y recurre a los movimientos sociales”. En tanto, este medio confirmó que, además del Movimiento de Trabajadores Excluidos-Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (MTE-UTEP), también están participando en la entrega de comida: el Movimiento Evita; la Corriente Clasista y Combativa y Nuestra América.
El DiarioAr, por su parte, dio a conocer que otro de los puntos del país en donde se lleva a cabo la articulación es Mendoza, lo que hizo que fuera sobrerrepresentada en la entrega de comida en el convenio que firmaron. Según lo establecido, recibió el 15% del total de los 465.000 kilos de leche en polvo, es decir unos 69 mil kilos, mucho más que en otras jurisdicciones con mayor densidad poblacional e índices de pobreza, como son Córdoba (donde destinan 34.240 kg) y Santa Fe (10.000 kg). En esa provincia, será la UTEP la que defina las prioridades por localidad.
“Lo que veo es un capricho y un odio que los llevó a aplicar una política espasmódica”, dijo Caropresi por el accionar del Gobierno ultraderechista de Javier Milei, que durante estos seis meses buscó instalar una narrativa prejuiciosa con los comedores y merenderos y sus referentes. “Terminamos con el curro de muchos”, dijo el vocero Manuel Adorni y repitieron muchos otros funcionarios al unísono.
Mientras tanto, la crisis económica, la inflación, los despidos, el achicamiento del Estado sostenidos por la desregulación de la economía del mega DNU 70/2023 empujaron a miles de personas a la pobreza y a la indigencia. Eso, se ve día a día en las calles y, también, en los comedores a los que el Gobierno nacional les negó la comida durante sus primeros seis meses de gestión: “Los niveles de asistencia a los comedores se duplicaron respecto a la pandemia, sobre todo, en los grandes centros urbanos, como Buenos Aires, Rosario, Jujuy, Posadas, en donde la mayoría son niños y niñas y jubilados y jubiladas. No veo una respuesta ante este contexto de crisis”, marcó Caropresi.
Un diputado de LLA a cargo de repartir los alimentos en Rosario
En Santa Fe la polémica gira en torno a la Fundación Camino –cercana a Conin-, con tres sedes en Rosario, Santa Fe, y cuya presidencia está en manos de Cecilia María Rouillón, esposa del ultraderechista de La Libertad Avanza (LLA) Nicolás Mayoraz. Al momento recibieron 10 mil kilos de alimentos.
Según publicó el portal La Política Online, Camino y el apellido Rouillón están ligados al Opus Dei. De hecho, Camino es el nombre de uno de los libros escritos por Josemaría Escrivá de Balaguer, el fundador de la orden de extrema derecha. «Es una institución civil sin fines de lucro que nace como fruto de una inquietud solidaria: Servir de instrumento para que los ciudadanos tomen conciencia de la responsabilidad que les corresponde en la edificación de la familia y de la sociedad», describe la fundación en su web.
El Destape
