Con la presencia de Fernanda Raverta en la Bicameral, el oficialismo defendió la propuesta conocida el lunes por la noche, muy similar a la implementada entre 2008 y 2017. Las fuertes críticas de la oposición, que presentó un proyecto en minoría.
La Comisión Bicameral Mixta de Movilidad Previsional se reunió este jueves para darle punto final a las propuestas en torno a la nueva fórmula de movilidad jubilatoria. Así, se firmó un dictamen de mayoría, elaborado por el Frente de Todos, mientras que la oposición suscribió uno en minoría, que básicamente critica el del oficialismo y cuestiona que haya avanzado con el mismo de manera unilateral.
El proyecto del oficialismo tuvo 11 firmas, -entre las que suscribieron los funcionarios integrantes de la comisión especial-, mientras que el de la oposición consiguió 6.
La fórmula elaborada por el oficialismo se compone de una combinación entre la evolución salarial (índice RIPTE) y la recaudación de la ANSES, por partes iguales, similar a que se aplicó entre 2008 y 2017.
La comisión que preside el entrerriano Marcelo Casaretto recibió a la titular de la ANSeS, Fernanda Raverta, quien afirmó que “nuestra fórmula tiene que ver con reparar algo que salió muy bien, con una fórmula, y muy mal con otra”. Comparaba a la aplicada a partir de 2009, durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, que permitió, dijo, que evolucionaran los haberes de tal manera que crecieran en un 25,8% por arriba de la inflación. En el gobierno de Mauricio Macri, en cambio, hasta 2019 los haberes perdieron contra la inflación un 19,5%, explicó.
Según la funcionaria, este año de pandemia los jubilados “pudieron estar mejor que la inflación. Los de la mínima recuperaron más del 5% de su capacidad de compra; más del 80% de los beneficiarios tuvieron un aumento superior a la inflación”. Agregó que en diciembre y enero recibieron bonos de 5 mil pesos y en abril otro de 3 mil, a lo que agregó beneficios tales como la suspensión del cobro de cuotas de los créditos ANSeS, y el congelamiento de las tarifas de servicios públicos.
Raverta reseñó las 17 reuniones que tuvo la bicameral para desarrollar su trabajo y destacó que la fórmula elaborada por el oficialismo “toma en cuenta los principales argumentos presentados por los expertos que expusieron en la comisión y busca consolidar acuerdos sociales de largo plazo”.
Asimismo, dijo, “tiene algunas cuestiones técnicas como reducir los rezagos, sobre la importancia de utilizar datos que sean los más recientes posibles para el cálculo de la fórmula”, al tiempo que puntualizó que la fórmula considera, como la de 2007, la evolución de los salarios, los recursos de la ANSeS y la evolución de los beneficios de ese organismo. Acompañando su exposición con filminas, la funcionaria señaló que la propuesta oficial “garantiza que los beneficiarios se vean favorecidos ante el aumento de los salarios y la recaudación por sobre la inflación. En los 9 años que estuvo vigente, permitió que la movilidad superara a la inflación en casi un 26%”.
Para mí en lo personal es conmovedor, porque en este lugar no voté la fórmula anterior, que la realidad demostró que no era una buena fórmula. Esta es absolutamente reparadora”, afirmó Fernanda Raverta.
Por otra parte afirmó que “la fórmula tiene sustentabilidad jurídica al recuperar la esencia de la fórmula de 2008, que no ha tenido litigios y es jurídicamente robusta”.
En cuanto al desarrollo de la fórmula, Raverta señaló que “si la Argentina no crece, estamos en un problema grave”, pero afirmó que “nuestro Gobierno vino a hacer crecer a la Argentina. Porque somos un gobierno que cree que los salarios le ganan a la inflación y que si hay más consumo, hay más ingresos tributarios”. En ese sentido afirmó que “vamos a volver a esa idea de que cuando un jubilado accede a una jubilación no lo hace para quedarse en su casa y sobrevivir, sino para seguir proyectando sueños”.
“Para mí en lo personal es conmovedor, porque en este lugar no voté la fórmula anterior, que la realidad demostró que no era una buena fórmula. Esta es absolutamente reparadora, tiene la posibilidad de ser cotejada con la realidad porque estuvo vigente en la Argentina”, diferenció la titular de la ANSeS.
La oposición se manifestó sorprendida
Por la oposición expuso en primer lugar el diputado radical puntano Alejandro Cacace, que confesó “cierta decepción política por la forma como se ha llegado a esta propuesta. Hubo 16 jornadas con la idea siempre de arribar a un consenso y una propuesta conjunta, y nos encontramos con la sorpresa de que el Ministerio de Economía el lunes emitió un comunicado con la fórmula, en vísperas de la visita del Fondo Monetario Internacional”.
“Creímos que tras todos esos expositores, íbamos a tener una instancia para buscar ponernos de acuerdo, y el ver que la decisión sobre la fórmula es prácticamente idéntica que la que regía durante la presidencia de Cristina Kirchner nos hace pensar que todo fue una puesta en escena para una decisión que estaba tomada de antemano”, expresó el diputado de Juntos por el Cambio.
Al analizar el fondo de la cuestión, confesó que había cosas en las que coincidía con Fernanda Raverta y otras en la que difería. “No desconozco los resultados”, admitió, pero sugirió tener en cuenta que no se deben confundir las variables con el contexto. En ese sentido señaló que entre 2008 y 2017, hubo años con fuerte crecimiento económico, como 2010. “No es la situación económica que tenemos hoy, donde las variables están muy deprimidas, los salarios crecieron 6 meses por debajo de la inflación, la recaudación ha tenido una caída estrepitosa y justo esas dos variables son las que se toman para esta fórmula”, aclaró.
Por otra parte, Cacace expresó lo que definió como una “preocupación sustancial”, y es la de que la fórmula del oficialismo remueve la variable de la inflación. “Pensemos en el perjuicio que ha generado la suspensión de la movilidad este año: ha resultado que todos los jubilados pierdan entre mil y 18 mil pesos por beneficio. Lo cual ha resultado un ahorro de más de 72 mil millones para el Estado”, sostuvo. Y remarcó que “quitar la inflación como variable es quitar la garantía de que los jubilados puedan proteger su poder adquisitivo”.
En cuanto a la sustentabilidad, Cacace dijo que la oposición no cree que ese elemento deba ser hecho a través de la recaudación: “Es innecesario, porque hemos acordado y sancionamos una ley de defensa del Fondo de Garantía de Sustentabilidad; creemos que con la ley que está aprobada tenemos los elementos para que cualquiera sea la fórmula elegida, no necesitamos introducir la recaudación para garantizar la sustentabilidad, porque tenemos el FGS, que podemos usar como fondo anticíclico para ese propósito”.
“La situación de la recaudación y su inclusión no es buena para los jubilados y la economía -agregó-. Para los jubilados, porque los hace sujetos a las variaciones que el Estado tiene respecto de la economía; necesitan tener un ingreso estable, reducir su volatilidad. Lo que más la reduce es la inflación. Si bien es cierto que puede haber salarios que crezcan por encima de la inflación, la mayor volatilidad la otorga la actualización por el IPC. Además, es malo para la economía porque las hace procíclicas. La contracara es que en los momentos de recesión es cuando menos crecen los haberes y eso impacta negativamente sobre el bolsillo de los jubilados”.
Quitar la inflación como variable es quitar la garantía de que los jubilados puedan proteger su poder adquisitivo”, expresó Alejandro Cacace.
El diputado radical señaló que “Argentina es uno de los países que más recesiones ha tenido en los últimos años, y es por la característica estructural de nuestra economía. Aumentamos gasto corriente en los momentos de auge”, precisó, ante lo cual sugirió: “No construyamos esa fórmula que profundice ese carácter procíclico de gasto público”.
“Es muy difícil discutir cuando se hace una negación absoluta de la realidad”, dijo a su turno Carlos Heller. Señaló en ese sentido que acababa de mostrar Fernanda Raverta un gráfico que demostraba que entre 2008 y 2017 las jubilaciones habían subido un 25%, aplicando la fórmula anterior, mientras que con el Gobierno de Cambiemos bajaron 19 puntos. A su vez, los haberes se recuperaron a través de los decretos de esta administración, dijo, afirmando que “esos son los datos reales, y después sobre esos datos se empiezan a construir supuestos de distinta naturaleza. La fórmula anterior era imaginada para un país donde la inflación iba a estar contenida”.
Heller sostuvo que “la realidad es que el nuevo índice propuesto ha demostrado ser exitoso a lo largo de un período extenso; este índice es muchísimo mejor que el que se está dejando atrás, porque desvincula primero a la inflación de la fórmula y al atarla al salario, que viene muy deprimido producto de las políticas anteriores y que está en el marco de una política donde se dice expresamente que entre los objetivos está la recomposición salarial. Ese es un elemento que alienta a pensar que va a llevar a una recomposición real de los ingresos previsionales. No se puede descolgar el análisis de la fórmula, si se la saca del contexto y los objetivos que tiene el gobierno que la va a aplicar”.
“No se pueden considerar fórmulas si no se consideran en el marco de las políticas en las que fueron aplicadas”, remarcó, asegurando que “estamos pensando en un país donde se van a recuperar las variables”.
Luego fue el turno de la senadora santacruceña María Belén Tapia, que cuestionó que la fórmula presentada por el Gobierno “de ninguna manera salió del seno de la comisión que integramos y no atiende lo que los expositores dijeron. El final de esta puesta en escena pone al descubierto el ahorro que significó para el estado la suspensión de la fórmula jubilatoria. Fuimos un mal necesario para un plan premeditado por ustedes”.
“Discursos sobran, demagogia también, pero los hechos son los que se analizan”, concluyó.
A su turno, el senador cordobés Carlos Caserio (Frente de Todos) salió al cruce de los cuestionamientos opositores respecto de que se volvía a la fórmula implementada durante la gestión de CFK. ¿Por qué las cosas buenas no pueden repetirse? Cuando un gobierno tiene buenas medidas y otro aplica políticas que son negativas, es lógico volver a la situación anterior”.
“Estamos hablando de situaciones ya desarrolladas que permitieron una época de virtuosidad”, agregó, afirmando que volvían a esa fórmula “porque es buena para los jubilados”, y dijo sentirse “muy satisfecho” porque durante la pandemia el presidente hubiera podido darle a los jubilados a través de decretos “un aumento que superó en 5 puntos la inflación”.
Admitió el senador cordobés que “ninguna fórmula es perfecta, porque depende de la evolución de la economía; pero hay algunas mejores que otras. Esta es una fórmula previsible que va a permitir que el país se desarrolle y los jubilados puedan estar mejor. El año que viene los haberes de los jubilados van a crecer y no solo con relación a la inflación, sino respecto de la otra fórmula”.
Fue el turno entonces del diputado radical Luis Pastori (Misiones), que se detuvo en analizar las formas, “porque hacen al fondo de la cuestión”. Manifestó entonces su “decepción, desazón, porque después de seis meses de funcionamiento de la comisión, nos venimos a enterar el lunes a través de una gacetilla de prensa que el oficialismo ya había decidido cuál iba a ser la fórmula que vendrían a imponer en esta comisión”.
“El proyecto no fue elaborado en el seno de esta comisión -se quejó-. Hemos sido actores de reparto de una comisión que debería haberlo discutido en profundidad. Raverta habló de consenso… ¿Consenso entre quiénes? Esta fórmula es muy parecida a la vigente durante el período 2009-2017, con algunas correcciones que la empeoran. Nos sentimos usados, yo sé que no es la palabra, pero es la forma como nos sentimos”.
Por su parte,, el senador pampeano Daniel Lovera aseguró que “esta propuesta de fórmula de movilidad tiene como objetivo recomponer el haber de los jubilados y corregir el sistema previsional de los argentinos, que ha sido dañado fuertemente en la gestión anterior”. Y tras cuestionar “las imprudencias que dicen quienes fueron gobierno hasta recientemente”, dijo que “estamos convencidos de que esta fórmula es más justa y equitativa”.
A su turno, Roberto Arias, secretario de Políticas Tributarias del Ministerio de Economía, afirmó que se está llegando a “una fórmula que expresa lo mejor que tuvo en los últimos años la seguridad social”. Agregó que “combatir la desigualdad genera también una mejora en las posibilidades de crecimiento económico, porque la seguridad social, cuando tiene efectos distributivos, genera que el crecimiento económico se vaya dando a partir de ese proceso de distribución”.
El diputado del Pro Luciano Laspina criticó que “hemos escuchado a muchísimos expositores, pero no nos hemos oído. Porque la enorme mayoría recomendó aplicar lo que se aplica en el resto del mundo: fórmulas que tratan de preservar el poder de compra de las jubilaciones. La mayoría de países aplica criterios que permiten preservar el poder de compra”.
“Esta fórmula tiene como defecto sustancial mezclar la discusión del ajuste con la del nivel de las jubilaciones. Entonces hace un debarajuste que no entiende nadie”, criticó. Y luego afirmó: “Dato mata relato… El haber mensual para alguien que gana dos jubilaciones mínimas, con la ley de 2017 tendría que cobrar 38.274 pesos; con el decreto de Alberto Fernández ganó 34.547 pesos. O sea, le sacan por esa vía a ese jubilado que es de clase media baja, 3.727 pesos. Datos, es un 10% de recorte que se hizo. Claro, la fórmula no funcionó… si le sacaste el 10% de recomposición real que tenía que tener. Justamente para eso fue diseñada nuestra fórmula”.
“Por supuesto que salió mal”, admitió, y agregó: “Porque cortaron ustedes cuando la fórmula tenía que operar lo que tenía que hacer”. Y calculó el ahorro fiscal que tuvo el Gobierno por esa vía en 100 mil millones. “A vuelo de pájaro”, estimó.
Parlamentario