El largo plazo se impone sobre el corto: pese a pagos de deuda con reservas negativas, hubo nuevas alzas en bonos. Nubarrón: no harán pagos al FMI hasta que no haya acuerdo.
Ni las demoradas negociaciones con el FMI, las reservas negativas del BCRA o los vencimientos que se aproximan de deuda el 9 de julio por u$s 1100 millones atemorizan al mercado. El riesgo país marcó ayer un nuevo retroceso de 4%, apuntando ahora a los 2.200 puntos.
¿Qué está viendo el mercado? En tres semanas se produce el vencimiento de deuda por u$s 1100 millones por los bonos globales emitidos por el fugaz Martín Guzmán en el 2020 tras completar la restructuración de la deuda.
En condiciones normales, se trata de un pago que no debería generar ninguna sospecha por el bajo monto. Pero en un contexto de reservas escasas del BCRA, aparecen interrogantes en analistas del mercado sobre los cumplimientos de estas obligaciones. El pasado argentino en materia de incumplimientos alienta ese tipo de sospechas.
Desde el Ministerio de Economía y desde el BCRA nunca se puso en duda el pago. Los vencimientos de la deuda en pesos los están afrontando con emisión indirecta del BCRA, descartando cualquier posibilidad de restructuración o «reperfilamiento».
Con los vencimientos en moneda extranjera, no queda otra alternativa que recurrir a las arcas alicaídas del Central.
Aquí entra en escena entonces la negociación en curso con el FMI. Ayer la novedad pasó por el BCRA que no giró ni un dólar a las cuentas del Fondo en Estados Unidos de los vencimientos acumulados en las últimas 48 horas que ascienden a u$s 2.600 millones.
Ni siquiera fueron girados los cerca de u$s 1.600 millones que tiene el BCRA en sus reservas en DEG (Derechos Especiales de Giro), la unidad de cuenta del FMI.
Por el momento, los mercados no dan relevancia a este ruido en las negociaciones con el organismo internacional.
Ayer los bonos Globales se operaron con fuertes subas y los de legislación argentina, como el AL30, treparon cerca de 8% en el día. El corto plazo no amedrenta tanto, habida cuenta del «trade electoral» y la llegada desde el 10 de diciembre de un Gobierno promercado.
El clima positivo con los bonos argentinos se dio en un contexto negativo entre emergentes con los diferentes fondos o «ETF» operando en negativo.
«No va a haber ningún pago al FMI hasta tanto no haya acuerdo», aseguró una alta fuente del gobierno a El Cronista.
Esto significa que las negociaciones están lejos de llegar a un acuerdo. El país entra en atrasos con el organismo internacional, tal como sucediera en marzo, pero en esa ocasión se alcanzó un rápido entendimiento.
Que la Cancillería envíe una carta al presidente de Estados Unidos Joe Biden firmada por presidentes de países latinoamericanos como AMLO y Lula refleja también que no hay apoyo de los países del G7 por ahora a la Argentina dentro del directorio del FMI.
Rareza argentina: el corto plazo luce más oscuro que el largo plazo.
El Cronista
